Frozen

(Frozen, EUA, 2013)
Estrellas: ****1/2

Directores: Chris Buck, Jennifer Lee

Voces en ingles: Kristen Bell, Josh Gad, Idina Menzel, Jonathan Groff

De niñas; Elsa y Ana jugaban todo el tiempo; la primera, tiene el poder de hacer hielo con las manos y era feliz divirtiendo a su pequeña hermana; hasta que un día, sin querer, la lastima, por lo que sus padres deciden separarlas… éste es sólo el inicio de la película.

Frozen muestra los mejores avances de la animación en 3D, sí; pero mas allá de eso, cuenta la enternecedora historia de dos hermanas y de los anhelos de cada una; de Ana, por encontrar el amor y recuperar el cariño de su hermana, y de Elsa, por sentirse libre y poder desarrollar su potencial sin lastimar a nadie.

Desde Tangled no disfrutaba tanto una película de Disney, y es que en Frozen se reúnen todos los elementos que hicieron de este estudio lo que es hoy, y sobre todo, que demuestran una evolución de los tradicionales cuentos de hadas: heroínas creíbles y entrañables, cómplices hilarantes (como Olaf) y príncipes azules que más allá de ser miembros de la realeza, demuestran su valía enfrentando obstáculos con ingenio y sin armaduras.

Además, los temas musicales, de Kristen Anderson-Lopez y Robert Lopez y con música de Christophe Beck, son efectivos y emocionales; sobre todo “So you Want to Build a Snowman” y “Let it Go”; mención aparte merece “In Summer”, interpretado por Olaf y que se vuelve uno de los momentos más divertidos de la película.

Se nota el involucramiento de los directores: de Chris Buck (quien antes hizo Tarzan) y Jennifer Lee (responsable de la extraordinaria Wreck-It Ralph), y quien, además de convertirse en la primera mujer en dirigir y escribir una película de animación de Disney, consigue orquestar a personajes que hacen reír, suspirar y por momentos, hasta llorar.

La animación, por supuesto, también está a la altura, con un Arendelle (inspirado en Noruega) que refleja hermosos paisajes de nieve, montañas, árboles y en donde hasta el pelaje del reno Sven está meticulosamente trazado.

Con una historia dinámica que nunca aburre, números musicales memorables y sobre todo, con bonitos mensajes sobre la perseverancia, el valor de la familia y el amor (que no es como lo pintan), Frozen se ha convertido en una de las películas más taquilleras de la temporada, y una que no perderá vigencia.

Ya veo a niñas y niños cantando estos temas en el futuro; igual que nosotros seguimos cantando los de La Bella y la Bestia y La Sirenita; y, si los productores son lo suficientemente listos, hasta pueden llevarlos a un musical de Broadway. El show sobre hielo es obvio, ¿no?

Titanes del Pacífico

Titanes del Pacífico

(Pacific Rim, EUA, 2013)
Estrellas: ****

 

Director: Guillermo del Toro (Hellboy, El Laberinto del Fauno)
Actores: Charlie Hunnam, Idris Elba, Charlie Day

 

Crítica:

Pacif Rim es sorprendente, no importa que expectativas tengas de ella; si viste o no el trailer o si te gusta o no el estilo de Guillermo del Toro. Ésta es una película grande, llena de emoción, y con una trama que involucra.

En un futuro no muy lejano, por ahí de 2017, la Tierra ha empezado a ser invadida por los kaijus: monstruos gigantes (tipo Godzilla) que amenazan con destruir a la humanidad. El primero atacó San Francisco, el segundo Manila y el tercero borró del mapa a Ciudad de Cabo.

Los hombres, como respuesta, crean a los Jaegers; robots gigantes que son controlados por pilotos muy calificados y que tienen el solo objetivo de aniquilar a las enormes criaturas.

Desde el principio, Del Toro, de la mano de su co-guionista Travis Beacham (responsable de Furia de Titanes), nos mete de lleno a la trama por medio de dos personajes: Raleigh (Hunnam) y su hermano Yancy, quienes son el equipo perfecto y se coordinan maravillosamente en la eliminación de kaijus, esto, hasta que después de un accidente Raleigh decide retirarse del mundo de los Jaegers.

En ese tiempo que él se dedica a la construcción (cinco años), la situación con los kaijus empeora día a día y su frecuencia y alcance es cada vez más peligroso, por lo que el joven piloto accede volver a los Jaegers, y ahora auxiliado por Mako Mori (Kikuchi).

Sí, la película está llena de acción y continuamente sorprenden los efectos especiales, pero, lo que resulta más destacable es cómo el director involucra en todo momento a los espectadores contando la historia de cada uno de sus personajes; para que todos sean importantes, para que todos aporten algo.

Desde el protagonista, pasando por un científico y hasta el traficante de órganos de kaijus (interpretado por Ron Perlman) resultan interesantes y, en varios casos, entrañables.

Y así como cada personaje resulta fundamental; también cada elemento de la película: la música (de Ramin Djawadi), la fotografía (de Guillermo Navarro), la edición, el sonido, y por supuesto, los efectos visuales, cumplen disciplinadamente su función y embonan adecuadamente como un todo.

Guillermo del Toro ha dicho que trata con igual respeto y dedicación a los actores que a su gente de efectos especiales, y eso se nota; cada escena de acción está cuidada de modo que se aprecian muy bien los detalles, pero no como consecuencia de perder a los protagonistas, que es lo que normalmente ocurre en las películas de verano en donde tantos efectos especiales borran, o demeritan, a las personas.

Hay que reconocer que ésta era una película difícil de mercadear; si bien el trailer resulta llamativo, el concepto de robots, podría pensarse, era similar a los Transformers; además de que el conflicto entre Jaegers- kaijus podría resultar llamativo sólo para cierto tipo de gente (principalmente adolescentes y geeks); no obstante, ésta es de esas películas que, al menos confío, se va a recomendar mucho de boca en boca, porque realmente apantalla.

Si algo le critico a Del Toro es no haber incluido aquí a alguna gran estrella, y ojo, no porque estos actores no hagan una extraordinaria labor, sino porqué, desafortunadamente, una gran cantidad de espectadores sí compra un boleto de acuerdo a la figura que esté en el póster.

Con todo, esperemos que esta película tenga una suerte similar a la de Avatar, cinta que, aunque no tenía a grandes estrellas logró contar una historia diferente, con sorprendente tecnología y que tuvo una gran aceptación entre el público.

Sólo queda esperar a que estos titanes no sólo ganen la batalla contra los kaijus, sino también la de taquilla.

 

Veredicto:

Titanes del Pacífico es deslumbrante; contiene todo lo que toda buena película de acción debería tener y le suma personajes tridimensionales y una historia que involucra. Absolutamente recomendable.

 

El Hombre de Acero

El Hombre de Acero

(Man of Steel, EUA, 2013)
Estrellas: **1/2

Director: Zack Snyder (300, Sucker Punch)
Actores: Henry Cavill, Amy Adams, Michael Shannon, Russell Crowe, Kevin Costner, Diane Lane

Crítica:

Vi Superman hace algunas semanas; sigo digiriéndola. Me parece muy distinta a lo que anticipaba y sobre todo muy diferente a lo que podría esperarse de una película veraniega (que normalmente es sencilla, disfrutable y sin mucha profundidad); ojo, no por ello digo que esta película sea mala, solo que hay que estar preparados para ver una aproximación muy particular hacia este superhéroe.

Para mí, El Hombre de Acero es una película rara; por un lado tiene una propuesta visual interesante, recordemos que Zack Snyder (el director de 300) se caracteriza por sus imágenes progresistas; pero, por el otro lado, esta cinta se enfoca demasiado en las acciones y muy poco en el corazón del personaje, lo que en mi opinión genera que a la audiencia le cueste un poco identificarse con él. Sí, es Superman y estamos predispuestos a que nos caiga bien, pero la realidad es que aquí no lo consigue del todo.

La trama se centra en un inicio en la lucha interna de Superman/Kal-El, un originario del planeta Kriptón, por encajar y por poder hacer algo por la tierra, después viene su lucha contra el General Zod (Shannon) quien a toda costa quiere su cabeza.

El elenco de este filme es sobresaliente, reunir a Russell Crowe, Amy Adams, Kevin Costner y Diane Lane no es poca cosa; pero por momentos pareciera que sus participaciones están forzadas (sobre todo la de Crowe, quien, cuando ya no esperas saber de él, sigue apareciendo).

Amy Adams es punto y a parte; es una estupenda actriz y lo ha demostrado en cada elección de sus proyectos (como La Duda, The Fighter, o The Master), pero aquí tiene una misión difícil: ser la conexión de Superman con los humanos mientras a la par toma decisiones tan extrañas como levantarse en el Ártico a las 3 de la mañana, a menos 40 grados, para meterse a una cueva peligrosísima a ver qué encuentra. Un periodista siempre está buscando información, sí, pero como periodista considero que a esta mujer también se le zafan los tornillos.

Ahora, Henry Cavill parece limitarse a hacer aquello que le indican, no me parece que decepciona, pero tampoco sorprende. Lucha contra todo, lo atacan mil veces y nunca se le ve cansado, preocupado o despeinado.

Sé que por definición Superman es un héroe muy distinto a Spiderman, pero también sé que en el caso del segundo al haberse centrado más en su lado humano, se vuelve más sencillo conectar con él (tanto como para que se hagan y rehagan varias películas y obras de teatro en torno al personaje).

La anterior película de Superman (de 2006) fue un fracaso en muchos sentidos, sobre todo de taquilla. En este punto esta versión ya la superó pues lleva recaudados alrededor de 400 millones de dólares. Para los ejecutivos por supuesto que es suficiente, para mí, se podrían haber alcanzado más, podría haberse recuperado un verdadero fanatismo hacia el personaje, como del que gozan Iron Man, Spiderman, Batman, etc.

En conclusión creo que la película sorprende, pero sorprende porque te bombardea con miles de secuencias y efectos especiales entre los Clark Kent termina perdiéndose.

En verdad ésta es de esas películas que amas o en las que no conectas para nada. Cada quien decidirá.

Veredicto:

Desde que vi el trailer moría por ver la película, pero, para mí, a pesar de toda la acción y la parafernalia se queda corta en cuanto a profundidad y corazón.

El Gran Gatsby

(The Great Gatsby, EUA, 2013)
Estrellas: ****

Director: Baz Luhrmann (Romeo + Julieta, Moulin Rouge)

Actores: Leonardo DiCaprio, Joel Edgerton, Tobey Maguire y Carey Mulligan

Crítica:

Para quien disfruta en una película no sólo de la trama o los actores, ésta es una gran opción; el estilo visual de Baz Luhrmann, responsable de cintas como Romeo + Julieta y Moulin Rouge es único: la cantidad de color y de movimiento; los excéntricos, pero entrañables personajes, y una gran variedad de artistas musicales, logran que cada instante se convierta en una experiencia única de luz y sonido, y aquí, las fiestas de Gatsby, no son la excepción.

El Gran Gatsby, obra de F. Scott Fitzgerald, es, para quien no lo sepa, uno de los mayores clásicos de la literatura estadounidense; una constante referencia en el cine, la televisión y la literatura, por lo que, aunque ya había sido llevado varias veces a la pantalla grande, volverle a dar vida no era tarea sencilla, había que hacerlo de forma memorable. Y vaya que el director lo consigue.

Poniendo como sujeto principal a uno de los mejores actores de su generación: Leonardo DiCaprio, Luhrman ya tenía un trecho ganado, pero a este histrión le suma otros talentos en ascenso: Tobey Maguire, Isla Fischer, Joel Edgerton, y Carey Mulligan, quien se ha encargado, con cada personaje que ha interpretado en los últimos años, de dejar huella. Aquí recrea con delicadeza y perfeccionsimo a Daisy, una mujer que dejó de lado sus sueños y amores de juventud para casarse con un millonario que no la llena en ningún sentido.

Gatsby (DiCaprio), el personaje principal, es un hombre enigmático a quien conocemos solo a través de los ojos de su vecino, Nick (Maguire), joven que sabe que, aunque parezca que todos saben algo de Gatsby, nadie lo conoce en realidad. Esto hasta que su propio vecino se acerca a él, permitiéndole no sólo saber quién es, sino volverlo cómplice de su más grande anhelo: volver a encontrarse con el amor de su vida y a quien tuvo que dejar para irse a la guerra: Daisy.

La trama en sí ya es nostálgica, pero además de las impecables interpretaciones de los actores, Luhrmann suma los elementos que mencionaba y les añade otros: una edición dinámica, encuadres atrevidos, escenas memorables como la presentación de Gatsby y el encuentro entre de éste con Daisy, característicos peinados y vestuarios, y todo matizado con diálogos calcados del libro que vuelven a esta cinta una fiel adaptación, pero también un producto muy original, que sí, no es superior a Moulin Rouge, pero que sí resulta mucho más memorable que Australia.

Adicionalmente, el soundtrack, compilado por Jay-Z, incluye melodías de Sia, Emeli Sandé, Beyoncé, Florence Welch, Jack White, Fergie, entre otros, además de uno en particular, “Young and Beautiful”, de Lana Del Rey, que evoca perfectamente toda la melancolía y reflexión del personaje principal.

Por el estilo visual, la nostalgia de un amor que se ha perdido o por este valioso grupo de actores, vale la pena darle una oportunidad a Gatsby.

Veredicto:

¿Qué les digo? Baz Luhrmann es de mi directores favoritos y suma a Leonardo DiCaprio, sí, mi más grande amor de juventud, pero también un extraordinario actor.

Star Trek: En la Obscuridad

(Star Trek, EUA, 2013)
Estrellas: ****1/2

Director: J.J. Abrams (Misión Imposible 3, Star Trek, Super 8)
Actores: Chris Pine, Zachary Quinto, Benedict Cumberbatch, Zoe Saldana

Crítica:

No soy fan de Star Trek, honestamente, no es que sea necesario que lo diga, pero lo especifico porque nunca fui seguidora de la serie de TV, ni de las cintas anteriores y sin embargo esta película me enloqueció.

Star Trek Into Darkness reúne no sólo todas las características de una buena cinta de ciencia ficción: el escenario correcto, impresionantes naves futuritas, gadgets que todos quisiéramos tener y muy dignos efectos visuales (sobre todo en IMAX 3D); pero aquí lo sobresaliente es que esta secuela lo balancea con lo que debería que tener cualquier película: corazón y personajes entrañables.

En esta segunda parte, dirigida nuevamente por J.J. Abrams (a quien ahora respeto aún más y hasta muero por ver qué hace con la saga de Star Wars), el capitán Kirk (Pine) pierde la comandacia de la nave Enterprise luego de un incidente en donde su segundo al mando, Mr. Spook (Quinto), casi pierde la vida.

Sin embargo, Christopher Pike (Bruce Greenwood) confía en él y le devuelve el Enterprise, nave que poco después emprenderá una odisea para capturar al responsable de un atentado terrorista.

Hasta aquí, la trama es lo suficientemente cautivadora y la acción está a la orden del día; pero, conforme avanza aún más la historia, se van desenmascarando los personajes y se revelan verdades que la hacen todavía más interesante (y que no diré para no spoilearles nada), pero con decirles que la mayor parte de la gente de la sala que estaba conmigo aplaudía de emoción, sí, aplaudía.

Considero que la actuación de Chris Pine destaca sobre muchos actores de su generación (que interpretan a superhéroes o similares), aquí, Pine se toma muy en serio el personaje del capitán Kirk, lo aborda con respeto y lo vuelve completamente cercano al espectador.

A la par, Zachary Quinto, quien da vida al legendario Spook, resulta hilarante por su seriedad, impavidez y honestidad, además de su complicada relación con Uhura (Saldana).

El villano, interpretado por Cumberbatch, sorprende por su humanidad, en verdad éste no es el típico malo de una película de verano que hace las cosas sin razón y sin sentido, aquí, en verdad llega un momento en que hasta simpatizamos con su causa.

Destaco también el cameo de Leonard Nimoy, el Spock original y quien revela algo importante para todos aquellos que no teníamos la suficiente información del villano en cuestión.

Entonces, concluyendo, gracias al trabajo de tres guionistas: Roberto Orci (mexicano, por cierto), Alex Kurtzman y Damon Lindelof, Star Trek Into Darkness nos transportamos a un universo en donde descubrimos nuevos planetas o criaturas, pero en el que, no importando que la historia se lleve a cabo en un futuro y a miles de kilómetros de distancia, los personajes se sienten cercanos, además de que logran conquistar a sus antiguos fans, pero también a las nuevas generaciones.

Veredicto:

Hace mucho que un Blockbuster veraniego no sólo me gustaba, sino que además superaba mis expectativas. Aplausos.

La Delicadeza

(La Délicatesse, Francia, 2011)

Estrellas: *****

Directores: David Foenkinos, Stéphane Foenkinos

Actores: Audrey Tautou, François Damiens, Bruno Todeschini y Pio Marmaï

Crítica:

Hace mucho empecé este blog con la intención de recomendar películas que me movieran algo, que me provocaran sentimientos y, al hablar de ellas, deseaba lograr (aunque fuera en una muy pequeña medida), que no pasaran desapercibidas.

Es ingenuo pensar que una simple crítica puede afectar el resultado de la taquilla de una película; sin embargo, si tan sólo una persona a quien yo le recomendara determinada película va a verla, puedo darme por bien servida. Ayer uno de mis más fieles seguidores me recordó eso.

Entonces, voy a escribir sobre una película que ha seguido dando vueltas en mi cabeza: La Delicadeza.

Probablemente muchos tuvieron la oportunidad de verla en el Tour de Cine Francés que estuvo en México, pero, para los que no, actualmente está en cartelera.

La Delicadeza retrata diferentes etapas y momentos del amor; primero, la relación de Nathalie (la inolvidable Amelie, Audrey Tautou) con quien se convierte en su esposo: el encantador François (Pio Marmaï).

Desde el primer instante el encuentro entre estos dos seres, es mágico… cinematográfico, y sí, delicado…

Sin embargo algo sucede y Nathalie vuelve a estar sola, vuelve a experimentar la soledad luego de que ya se había acostumbrado a la compañía.

Eso me hizo pensar en que la mayoría de nosotros probablemente hemos estado en esa posición. Razones puede haber muchas, pero, en definitiva, cambiar una rutina ya conocida, por el silencio, el aislamiento, la melancolía y la nostalgia no es cuestión sencilla.

Cada persona reacciona diferente a los cambios de la vida; aquí Nathalia opta por centrarse en su trabajo; en destacar en lo que hace, en liderar ejemplarmente a su equipo, todo hasta que una compañera hace una indirecta de que ella vive sólo para trabajar.

Ese comentario despierta algo en ella que estaba dormido… y entonces, sin más, besa a Markus (François Damiens) un miembro de su equipo quien a partir de ese momento queda flechado para siempre.

A partir de ahí la narrativa de la película cambia y ahora se centra en el sentir y actuar de Markus. Su inocencia, ilusión y esperanza me recordaron por momentos a Tom, de 500 Días con Ella (como saben de mis películas favoritas / http://tinyurl.com/cy6l8gf) porque justo da vida a ese enamoramiento casi adolescente que, en mi humilde opinión, deberían vivirse en toda relación.

Nathalie y Markus son polos opuestos; sin embargo esta película nos recuerda algo importante, no el cliché de que ‘los polos opuestos se atraen’, sino que los polos opuestos pueden aprender a quererse, a disfrutar y aprender de las diferencias del otro, y sobre todo, que no importa el lugar o el día, hay que estar abiertos al amor, éste puede aparecer donde menos se le espera…

Veredicto:

La Delicadeza está tejida con conmovedores momentos, personajes humanos y una música preciosa que enmarca cada cuadro. Imprescindible.

(Para motivarse aún más a verla favor de escuchar esta hermosa canción de Emilie Simon que forma parte del soundtrack http://www.youtube.com/watch?v=Wo5XSAdSqEg)

Y por último les dejo una cita de mi estimado Rogert Ebert, quien acaba de fallecer hace unos días…

“I am too conscientious a critic to approve it entirely, and too big a sap not to fall for it”… Sums it all.

Rest in peace dear, you inspire a lot of us…

¿Sabias que?

En esta cinta el músico francés y autor de la novela homónima, David Foenkinos debuta en la dirección, junto con su hermano Stéphane.