La Princesa y el Sapo

(The Princess and the Frog, EUA, 2009)

Estrellas: ****

Director: Ron Clements, John Musker (The Little Mermaid, Aladdin)

Actores: Anika Noni Rose, Bruno Campos, Oprah Winfrey

Sinopsis:
Tiana es una mesera que sueña con algún día poder tener su propio restaurante. Un día se topa con un sapo y al besarlo, como pasa en la vida real, todo cambia.

Crítica:

Soy fan de Disney. MUY. De chiquita cantaba al son de Ariel y la Bella; me disfrazaba de Bella Durmiente… también me compré la mascota de Jazmín y lloré sin recato con la muerte de Mufasa… En general Disney me parece una de las compañías más increíbles de la tierra y para mí enterarme de que volverían a hacer animación tradicional y con una princesa de protagonista me emocionó en demasía. No me malentiendan, soy fan de Nemo, Ratatouille y Wall-E, pero las princesas son diferentes, se quedan en la memoria, trascienden de manera diferente… Como niña siempre tienes el deseo de ser princesa. Aún en las generaciones venideras estoy segura de que Blanca Nieves y compañía nos seguirán siendo completamente familiares.

Dicho así… Una joven, que no es princesa, (y no sé por qué titularon mal la película) sueña con cumplir el anhelo de su padre y poner su propio restaurante. Pero la pobre pobre es (y eso que de verdad trabaja duro). Todo esto ocurre en la icónica ciudad de Nuevo Orleans -no en un reino muy muy lejano como se podría pensar.

Un día un sapo (que habla) le dice que es en realidad el príncipe Naveen y que si lo besa volverá a la normalidad. Tiana, nada tonta, le pide algo a cambio y accede a la ranística petición. Pero entonces ella se transforma también.

La princesa y el sapo es entonces el recuento de las aventuras de este par que en su odisea se topan con todo tipo de excéntricos personajes, destacamos principalmente al bicho feo y a un cocodrilo amante del jazz.

Esta es una historia para los que disfrutaban o aún disfrutan de los clásicos de Disney. Es una película llena de referencias: Aladdin, El libro de la Selva, La Sirenita e incluso el Rey León nos vienen a la memoria. Y, por si fuera poco, ¡los personajes cantan!. En verdad que ustedes, público querido, no tienen idea de cuánto extrañaba yo que los animalitos y princesas entonaran cánticos de alegría para contarnos su historia.

El mensaje de la película es súper bonito y a chicas y a grandes les puede llegar, ¿por qué lo limito al género femenino? Porque así como Cars es buena pero le llega más a los hombres, ésta cursi historia se quedará más con las mujeres…

Sí, para nosotras que creemos todavía en los cuentos de hadas y en los príncipes azules (o verdes en este caso)… Para nosotras que le cantamos al amor y que creemos que sí se puede “vivir felices para siempre”---A lo mejor con problemas, con discusiones y adversidades, pero felices al fin y al cabo.

Veredicto:
Muy linda película pero que fácilmente podría gustarle sólo a los chavitos o a las mujeres. Aún así tienen gags y momentos divertidos, y, ¿ya dije que los personajes cantan?!