Título traducido: 500 días de Summer (no de otoño porque Summer se usa aquí como nombre propio)
Aquí le pusieron: 500 días con ella
Estrellas: ****1/2
Director: Marc Webb (Ópera prima)
Actores: Joseph Gordon-Levitt , Zooey Deschanel
Sinopsis:
Y como dice el inicio de la película: esta no es una típica historia de amor. Esta es más bien la perspectiva de la relación que Tom tuvo con Summer a lo largo de 500 días.
Crítica:
Tom es un chico ordinario, trabaja en una empresa que hace tarjetas de felicitación y su vida es más o menos normal hasta el día en que conoce a Summer Finn, una chica nada común.
El valor de esta cinta es que vemos la historia de esta pareja a lo largo de 500 días, sin ningún orden cronológico, vemos sólo fragmentos de la relación. Más o menos como nos pasa en la vida real, recordamos momentos con alguien no necesariamente en el orden en que ocurrieron.
Una vez recalcado que la historia y el guión son verdaderamente extraordinarios entremos a los detalles. Los personajes son absolutamente verdaderos, podrían ser nuestros vecinos. Aún Summer, con todo y su crueldad y franqueza, es una mujer que no teme decir lo que piensa, por más duro que sea. Ella es quien es. Tom, en el lado opuesto, es el típico romántico idealista, el que cree no sólo en el amor como concepto sino en el amor de pareja, idea que Summer no comparte en lo absoluto. Pero aún así Tom se enamora perdidamente de ella.
Complementando a esta pareja protagónica están los amigos de Tom y su pequeña hermana Rachel, quien nos regala momentos hilarantes.
También dentro de este escenario escuchamos de fondo un score y varias pistas musicales perfectas para la ocasión: The Smiths, Regina Spektor, The Temper Trap, She & Him (el grupo de la misma Zooey Deschanel) y hasta Carla Bruni nos ofrecen un complemento perfecto para la montaña rusa que estamos viendo. Con decirles que hasta un breve número musical (muy al tono de Encantada) ocurre en la cinta.
En una relación hay de todo: momentos buenos, divertidos, malos, difíciles… Aquí vemos todo eso, sin concentrarnos nada más en lo rosa como en cualquier otra chick flick.
He de confesarles que al ver el final de la película (no se los revelaré, no se preocupen) me quedé con un sabor agridulce; sin embargo tras meditarlo algunas horas y algunos días me di cuenta de que, como reza el slogan de la cinta, dentro de una relación uno de los dos puede encontrar a su alma gemela, y el otro… no.
Duele, es fuerte, es descorazonador, pero lo importante es levantarse, aprender de lo sucedido, quedarse con los recuerdos y esperar… que a la próxima, el sentimiento sea mutuo.
Pero aún en la relación subsecuente es fundamental concentrarse en el ahora, en el presente… no en el “para siempre”… después de todo quien sabe si este ocurra.